domingo, 12 de abril de 2015

DÍA DE JESÚS DE LA MISERICORDIA

DEL PERDÓN


Quédate a mi lado a la orilla del río,
refresca tu lindo rostro y respira,
tomemos alimento de la tierra
y reposa mientras preparo mi historia
para cerrar nuestro afortunado encuentro.

El perdón es la liberación del alma,
la ausencia sincera de un duelo,
la frontera sin puesto de vigilancia
que te hace una persona más liviana.
Aligera el curso de tus ríos internos
y alivia ese dolor que te atormenta.
Y habrán ocasiones, surgidas de la nada,
en que personas ingratas recorrerán tus pensamientos.
Pero al pensar en ellas, recuerda momentos buenos,
respira, lanza una bendición hacia su estrella
y déjala marchar en su silencio.
Dedícale esta oración de perdón:
"Dondequiera que estés hoy,
te envuelvo en mi plegaria.
Te veo sano, completo y libre,
bendecido por Dios en todo lo que haces.
Si algo en el pasado se interpuso entre nosotros
entre nuestra amistad y la confianza,
ahora lo pongo en la corriente del amor divino.
Tu y Yo somos constantemente uno en espíritu.
Lo sé cuando estamos juntos y cuando estamos lejos.
Cada amorosa plegaria que te envío
te alcanza en algún plano profundo.
Aunque no tengas conciencia total de mí,
estás bendecido por mi oraciones."
¡Los hechos pasan y hay que dejarlos ir!
Juega a soltar y desprenderse,
vive tu proceso de superación interior,
nunca esperes que alguien se de cuenta de quién eres.
Sin orgullo ni soberbia interior,
cierra la puerta, pasa la hoja y cierra ese círculo.


(...)


domingo, 5 de abril de 2015

PRIMAVERA DE ENCANTOS


II

Y todo vuelve a mí como siempre
con el susurro de las hadas palpitantes.
El peligro es confundir el sentimiento,
forzar lo que aún no se siente
y presentir falsos delirios que quién sabe...
quién sabe de que están hechas esas paredes de mármol
del mausoleo del noble caballero de las incertidumbres insensatas.
No hay hora, no hay momento, para seguir insistiendo
o querer aquello que no se quiere
o los deseos no correspondidos que sin intención
dejan en evidencia una nostalgia que se decía vencida.
¿Y qué contempla el incipiente místico entre tantas soledades,
acariciando suave y dulcemente aquello que tiende a ser volátil
y demasiado ligero para poder ser consolidado?

El hervor de tu libre sensación inconsciente
esfuma en susurro una inquietud que se evapora,
siento que me recuerdan y que alguien se me marcha.
¿Quién mira mi retrato en este instante?
¿quién agita las aguas que fueron tan tempestuosas
y su desesperado lamento de la Diosa Sedna en mi vida?
¿será causa o destino?
pero ya sé que no pareces estar
aunque con frecuencia en ti medito
y te miro en mi suspiro cuando las sombras antiguas
traen falsos colores, líneas dolientes y una sinfonía de ensueños.
Sin embargo, al mirar lo que me enseñaste hoy,
desata cualquier anhelo oculto en la intimidad de mi canción...
qué suave se veía tu piel desnuda, cubierta con hipócrita vergüenza,
pues si fuiste capaz de dejar que así el lente captara esas imágenes,
es que desde tu interno deseabas que otro ser así te contemplara.
Es allí donde yo me aparezco
cual lobo en acechanza vigilando su deseosa presa,
expectante y sediento de sangre fresca,
carne limpia, sedosa y tierna,
lista para ser trabajada con dulce y perfecto trato,
caricias, susurros sutiles y labios que se humedecen,
quejidos y jadeantes palabras que se disuelven en sus labios.
Y se pregunta el joven místico:
¿quién es capaz de negarle tan ligeros momentos
donde se podría disfrutar de la belleza de esa azucena,
el dulce almíbar de sus labios
y el azúcar de su piel pura e inmaculada?,
caramelo que no quería saborear
para evitar caer en el embrujo de su hechizo natural,
palmera de bahía distante, rosa desafiante de pradera,
cueva donde se guarda tu tesoro,
flor de botón que aún no se abre al mundo
y aparece pura ante mi asombro y mi angustia.
Suben las palpitaciones y los latidos se aceleran,
¿cuándo cubrirán mis labios parte de lo que sin mácula se muestra?
Esbelta y distante, oronda la luna vigila tu noche,
sabe más de lo que pudiera decir y solo ella resguarda tus secretos.
Misterios tibios que el universo baraja
y saca la mejor carta del juego donde nadie oportunidad posee,
y te dije una vez que no desearía tenerte que extrañar,
pero ya me ves enganchado a la cadena de un delirio derivado.
No soy valiente guerrero y no lucho para desafiar lo que siento,
me rindo al sentimiento y espero que mis pensamientos disueltos
lleguen a tu corazón inseguro y lo haga estable y bien sentido.
Dame tu caramelo y enjuágalo con el rocío de tu esencia.
Ángel de mi actual poesía y Ángel del corazón de hoy.


(...)

CEBA


sábado, 28 de marzo de 2015

LETRAS PARA LA SEMANA MAYOR

LA SEÑAL DE LA VIRGEN

Trenes en el viento,
Virgen purísima y mía,
quien en tu vigilia
pide: ¡PIEDAD!

Pompa azucena,
señal de soledad,
aire de mielcita, cansina
rubrica su mirada
y salpica su paz.

¡Mirad en los valles!
Campos cubiertos por labriegos,
cosechando su destino
sembrándote una ofrenda floral.

Límpiame la herida
y libérame de penas,
que se rebosó el vaso
y se hizo derramar.

Palpita tu corazón al norte
encendiendo un horizonte sin par.

Cómo nacen las flores,
cómo crecen tus árboles,
cómo riegas la tierra
y cómo enmudezco al amar.

Caricia,
fuego aplacado del rocío,
canta junto al turpial,
¡Despierta Virgen Divina
y permíteme decir: PIEDAD!...


César Borges - CEBA
"Más Allá de la Piel"

lunes, 23 de marzo de 2015

DE TUS ENCANTOS

DISFRUTANDO TUS ENCANTOS


I

Luego de ver lo que mostraste hoy,
quisiera oler y sentir en mis manos y mi cara,
las hierbas de tu monte escondido y más íntimo.

Esponjosa se vuele tu piel cuando te muestras tan libre.
Y bajo una tibia tristeza miro pasar la suntuosa llovizna
y todo se parece a ti que ahora no te tengo
en esta noche de pasiones suspirantes
cuando en el marco de mi mente te apareces a medio vestir.

Y qué deliciosa es la membrana que quisiera provocarle
espasmos de pasión en delirios de hermosos deseos
y apretados abrazos porque aunque lejos, desde aquí yo te quiero.

Y uno tras otro vuelven tus pensamientos a mi mente,
siempre recurrentes y ansiosos por todo lo que no se tiene
y no desespero porque que todo pasa como el viento,
se quema tu pasión en el verbo
y las aguas traen las ondinas que como la mar
parecen regresar a la orilla,
mientras con una provocativa media sonrisa,
las sirenas te cantan el retorno hacia su océano infinito,
y se hacen tolerantes mis suspiros
y la paradoja explica el sentimiento.


(...)

domingo, 15 de marzo de 2015

RENUNCIA

RENUNCIA

Nunca amaré su recuerdo
pues hizo de mí un desecho.
Jamás diré: «si te acuerdas...»
Si el sol se levantase con su aldea,
jamás recordaré, jamás diré,
jamás lluvia seca...

Nunca me verá rebuscando los papeles
para tropezarme con ella de vuelta;
jamás diré: en dónde se hallará su silueta.
Aunque inevitablemente la mañana lo traiga
por la ventana de su lejana tierra.

Nunca me mostraré sediento
buscando alivio en el algodón de sus besos,
jamás diré: cuánto la extraño...
sólo porque me dejó retorcido y enfermo.
Jamás la tendré... jamás su tiempo.

Jamás la tendré en un riachuelo
para desviar su curso y refrescar mi alma,
jamás la llamaré para mendigarle que vuelva,
jamás diré: nada como ella...
jamás recordaré su estela...
jamás su vuelta.

Nunca me despediré de ella,
para qué gastar una mañana nueva
en pozos encantados de penas,
jamás volveré...
jamás la cuidaré como ayer,
jamás otro tiempo...
jamás de vuelta.


CÉSAR BORGES

viernes, 13 de marzo de 2015

DESVELO

ENTRESUEÑOS

Dulce almíbar de tus labios
Que recorren gustosos,
Mis enrojecida mejilla,
Besando  mis párpados,
Flanqueado mi frente
Y deslizando tus encantos.

Oh! estrella de las Pléyades
Que Orión colgó en el cielo,
Para acompañarme en mis noches de desvelos, 
Guía noble e incandescente de su Sirius 
Que misteriosa me conducirá a los brazos de Morfeo 
Y a las praderas de mi sueño 
Con tu hermosa figura en mi mente.

Aurora colorida y serena, 

Aguasanta que te espera.

César Borges
TWITTER: @CEBABorges

lunes, 9 de marzo de 2015

DESEOS

Besos de almendra me saboreo 
en esta dulce tarde de pensamiento;
me resguardo en la calidez sublime,
que acompaña el cremoso aceite del lamer gentil
de tus labios que se sacian.

Verde el mirar de tus cristales,
hacen pausa y siguen el camino
sin importar su destino,
pues suyo es el espacio
y en este Amor no hay vacíos ingratos.

Se escuchan ya los pájaros de la tarde,
mientras sus retoños alcanzan refugio
ante  el resguardo perfecto,
cuál nido imperturbable.

Así me haces sentir bajo el manto 
amalgamado del clamor de tus brazos.
Hay pasión pero con respeto,
hay intensidad junto a los luceros,
hay amor en el cielo,
mientras los Ángeles entonan,
los cánticos iluminados
de la magia especial que emana 
de la gama fascinante de tu cuerpo.

Deseo un espontáneo abrazo,
un estrecho lazo
y tú beso natural
saboreando mis labios

César Borges